Irresponsabilidad en el querer

 En el fuego, a veces cuando uno busca calor se quema.

Nadie dijo que enfrentar el pasado fuera sencillo, que menos aún, uno siga sintiendo verguenzas o preocupaciones por cosas de la infancia pero, ¿qué sucede cuando obvias ese pasado a muchos años?

Los traumas son una especie caja de pandora, cuando se abren no sabes que vas a encontrar. Y conforme vas a aumentando la edad, la corriente de abrir la herida te lleva. No hay libertad, y el miedo te hace prisionero. 

Cómo transcurre abrir una herida muchísimo después, ¿cómo el cuerpo humano sobrevive a tanto?, la ansiedad y la depresión se transforman en tu contención y la soledad en tu mejor amiga. Una cantidad considerable de humanos a tu alrededor no es como algo ideal, es apabullante. Puedes rodearte de un mar de personas y hundirte con Soledad.

Hasta hoy no había abierto la herida, hasta hoy no me había dado cuenta de la irresponsabilidad al querer.

Intentar darle cariño a alguien quebrado por el dolor, es como poder tocar un suave corazón con la fragilidad de quebrarse, sentir la ambivalencia del disfrute de su sensibilidad pero con un mar de confusión por dar una respuesta.

No había sido antes irresponsable por asumir lo que sentía y querer a otro darle cariño sin esta persona querer. Y más aún, sin pesar en el impacto del sentimiento, un impacto extraño, un impacto que fue como una granada con esquelas.

Mi yo se partió, y las imágenes del dolor corrieron en el camino, un camino confuso donde lo único que hice fue llorar. Ahora no se que hacer, solo quiero huir, estar sola, pero no encuentro mi espacio, no puedo comprar mi libertad. Me encantaría pero no sé a donde ir, quiero ir muy muy lejos, como al campo, donde puedo tocar el cielo con las manos, donde tocar un árbol es la matriz de la tierra...necesito salir. Pero como salir si eres visita.




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