Escapar

 Esta es una ironía, como las constantes en mi vida, parece una película de serie b. De esas sin mucho presupuesto y efectos mediocres, aunque debo de confesar que desde que cruce el océano, la película vale un poco más.

Sueño con historias y mi pasión es ponerle música a las escenas de mi vida, lo cual deriva en que imagine historias inspiradas por música y que las escriba.

Tengo mucha imaginación, tanto que mis expectativas nunca encajan con el cuento de hadas o la pesadilla apocalíptica que relato.

Hoy no me concentraré en el dolor, ni en el éxtasis sino en lo que me dijo un amigo escritor, en hacer de esto una crónica de las pocas horas de este día. El día pasado me deja como experiencia que debo de incluir un personaje más frío en mis historias, uno más centrado en sus metas y donde la trama de amor quede en tercera o décima parte.

Demasiadas historias de amor se han escrito.

Porque no escribir una donde el amor sea una fantasía y el malo sea el amor de tu vida y que muera aparatosamente. Done.

Porque no escribir decidir entre dos hombres opuestos, el que tiene romance (el bueno) y el que te lleva a la pasión (el malo), para matar cruelmente a uno y resignarse con el otro. Ya lo hice.

El amor te engancha y más aún lo que es tóxico. Nos enamoramos de tíos que pasan de nosotras, que tienen un sesgo que porque nos gusta el sexo, somos putas. Nos enganchamos de tíos que les toman 2 años en formalizar con nosotras y jamás incluirnos en una foto. Nos enamoramos (permítanme ser generalista) de hombres para los cuales somos esclavas o mascotas, que no entienden que la sumisión es un virtud y elección. Humanos debo de corregirme, porque hombres y mujeres según la biología y no el género, tienen sesgos tóxicos.

El amor que tanto me hizo soñar, es mejor darlo por sentado, porque vende pero solo si hace daño. Es raro ver una película saludable, creo recordar una de Keira Knightley and Mark Ruffalo donde hay amor pero al final eligen crecer separados, lo cual es una chollada si piensas en princesas de Disney.

Las demás nos venden la idea de que el amor no es más que esa cosa que lleva a un desamor o happy ending. 

Hoy por ejemplo, no tengo apetito de declararme cómo días atrás ni decir cómo me encienden los juegos de BDSM. Hoy estoy enojada con mi emocionalidad.

Olvide en mi camino, mi promesa hacia mi misma, sí sí como Comer, Rezar y Amar. Pero soy escéptica, el amor siempre te roba un pedazo de ti, así que el problema es la elección de la pareja. Amor saludable al 100% no existe. 

Encontré un hombre dulce que me pidió matrimonio que solo conocía que defender su punto de vista era a través de una discusión acalorada. Eso no es lo ideal.

Encontré a un chico que a sus 23 años me recalcaba ser la número 23 de su lista de cama y me decía amor por teléfono pero cuando lo veía en persona me trataba como un témpano de hielo.

Encontré un chico que era muy dulce pero que su dependencia emocional aclaró mi perspectiva de querer un individuo con mayor sed por la vida.

Encontré un psicópata narcisista, uno que se me metió por los ojos y terminó encerrándome en un auto 3 horas para luego perseguirme y hacer de mi vida un infierno.

Encontré al hombre con quién quise tener hijos pero no asumía la responsabilidad de sus emociones, entonces la parte de hijos no es congruente y le dije adiós. 

No existen perfectos. 

Sueño por ejemplo con un sujeto de cabellos hermosos que apenas conozco, y seguro mi poesía voló a Marte para darle categoría de dios Heleno, pero no es más que un simple mortal al cual yo he idealizado de seguro.

Mi sentir no es confiable.

Ya no confío en mí.

Porque el sujeto en cuestión, no habla, no dice que siente, no entiendo. Porque el refrán a buen entendedor pocas palabras es una maldita chorrada y porque tiene escucha selectiva. Y yo, tengo sentimientos.

Siento.

Pasamos décadas para comportarnos como adolescentes, a él le rompieron el corazón y a mí también. Aunque después de mi última relación me acusaron de ser la mala de historia, me lo reclamaron como tal para después pedirme disculpas, o sea me metieron el puñal y luego me pusieron una bandita para contener la hemorragia.

He sangrado, he hecho duelo pero he perdido tanta sangre que tengo un trauma pero eso no implica lastimar al siguiente. So.

Hombre etéreo, soy muy literal cuando se trata de lo que siento, hablar es mi pesadilla porque enredo las palabras.

Necesito pistas porque puedo ver claramente el mundo de los demás pero el mío esta tan retorcido o de fantasía que necesito que me digan la realidad.

Entonces concluyo que soy ciega por ineptitud o ciega por inconsciencia.

El punto es que me declaro inocente y que estoy enojada por ello. Muy enojada conmigo misma.

Pero si algo concluyo es que de sentir esta mierda de mirarte y quedar embebida de tu belleza, y admirar tu yo en general al parecer no puedo escapar.

Maldición odio sentir, que estúpida contradicción.