día 21: Analogía del 97.

Quiero vivir como Way out west en su álbum del 1997, fascinarme por la pequeñas cosas, sonreír y respirar sin el peso de mis heridas no sanadas y malas decisiones.

Ayer resistí 12 horas en un lugar.

Ayer terminé diciendo lo que normalmente no digo, molestándome por fin. Para mi fue un paso gigante pero a la vez uno de retroceso. Fue darme cuenta de que me despierto y me persiguen los idealismos de tres cuerpos: El sol, La luna, y Las estrellas.

Llevó dos días teniendo pesadillas pensando en que las cosas no saldrán bien allá. Pienso en traslaciones y siento que la vida se me diluye por entre los dedos como arena. Quiero nadar, ser libre pero siento que esta realidad esta chueca, movida, inbalanceada. 

Pero si saco de la ecuación al factor soledad desde la oscuridad, el sol real, parece brillar.

A veces en mis mañanas me consumen tres factores que en un año han movido emocionalmente:

El sol japonés

La luna china

La estrella catalana

Parte de escribir es sanar y crear historias. Parte de sanar es aceptar y aprender a soltar historias. Aprender que a pesar de que quieras, ames o desees hay cosas que no son para ti, personas que ya no quieren nada contigo y que tal vez tu dejaste ir en primera instancia.La última no la dejé ir, me dejó mientras sanaba, mientras aquí me reconstruía en mis noches en vela y mis pesadillas de que el tiempo se acababa. 

Ayer por ejemplo descubrí que mi imagen corporal la he visto alterada por años, ayer descubrí que era super delgada hace diez años y propiamente hasta hace 3. Al menos lo identifiqué en tallas.

Identifiqué que aún el psicópata que me persigue en mis dos últimas noches en mis pesadillas, es una herida no curada y que inconscientemente, eso me hace temer de los hombres: de sus voces elevadas, de los lugares cerrados, de que me manipulen de nuevo.

Tengo miedo y debo de trabajar mi miedo porque he perdido mucho de mí en el proceso y si bien me ha llevado a esta conclusión, duele.

No importa. Debo ser fuerte, no más taponar la compañía que siempre desde niña me he tenido a mi misma, no necesito otros brazos para sentirme segura, para ello están mis piernas. No más deseo, porque yo me debo de desear primero. No más, amor vacío, porque el sol jamás fue consciente de muchas cosas hasta que me fui, la luna me consumió y la estrella me abandonó.

No más nadie fuera de mi órbita, no más romance...no.

Romance y romanticismo pero con la persona que lo merece, que hable por fin y que no hable de más. Que sea consecuente, que sea maduro emocionalmente y sobretodo responsable. Yo no soy martir, ni doncella en apuros, no soy madre ni salvadora, ni mucho menos la mujer sabia que tiene todo bajo control, pero quiero ser mejor. No soy la historia de otros en su cabeza, no soy lo que piensan de mi, ni lo que sienten por mi. Yo soy solo yo, lo que siento y vivo. YO.

Sol fue el amor de mi vida

Luna mi deseo más grande de amor

Estrella mi equilibrio, mi paz, mi tierra.

Hoy debo de construir mi hechizo:

De amor, deseo y equilibro en mi aire, armonía y en este planeta.

(Questions never answered / Way out west)